Me pide mi compañera Takun, que haga un artículo sobre la venta de una propiedad en exclusiva.
La mayoría de los propietarios temen firmar un acuerdo de venta de su propiedad en exclusiva porque temen varias cosas:
El agente será la persona adecuada para confiar en él.
¿Quedaré pillado durante un tiempo sin poder hacer nada?
Mejor que lo tengan varias inmobiliarias para que haya más posibilidades de venta…. Etc…
Estos miedos se repiten siempre, y los agentes inmobiliarios tenemos que entender a las personas con las que trabajamos, explicarles cual es la mejor forma de conseguir que ellos vendan su casa al mayor precio de mercado y en el menor tiempo posible y sobre todo, que tengan la seguridad de que vamos a representar sus intereses por encima de los nuestros propios y van a tener un proceso de venta seguro, transparente, informado y cómodo.
Yo nunca recomendaría una exclusiva al uso, contratar a un agente inmobiliario que no tenga acuerdos con otros agentes. Estos agentes, en lugar de colaborar son egoístas y lo único que pretenden es asegurarse que van a cobrar una comisión. Siempre contrataría a un agente, formado, que me inspire confianza y que después de explicarme lo que va a hacer para vender mi casa a través de un buen plan de marketing personalizado y una potente carta de servicios, con un buen equipo y que esté a la vanguardia en tecnología y técnicas, además me diga que colabora con otros agentes, principalmente a través de una mls o de otros acuerdos con compañeros. Estos últimos agentes, son colaboradores, entienden la profesión, harán que mi propiedad brille en el mercado y además le darán la difusión adecuada para que muchos compradores estén interesados en ella. Sí, digo muchos compradores, porque si tenemos varios, tenemos el poder en la negociación. Si tenemos uno sólo, el poder lo tiene el comprador.
La exclusiva es confianza mutua, del vendedor en el agente, convencido de que a través de su experiencia, sus contactos, su plan de marketing, su capacidad de negociación, sus acuerdos con otros profesionales y su equipo harán que el proceso de venta sea como él quiere y tenga la seguridad de haber vendido con las mejores condiciones de mercado. Confianza también del agente en el cliente vendedor, que le haya dicho la verdad, que haya entendido su forma de trabajo, que confíe en un sistema de representación y que ambos, juntos, lleguen al objetivo marcado.
Estas relaciones de confianza mutua consiguen siempre las mejores ventas, y es habitual que se conviertan en relaciones personales.
Un encargo de venta en exclusiva es confianza, y la confianza no se paga con dinero, se paga con confianza. Una comercialización a través de exclusiva compartida o multiexclusiva permite invertir al agente en las mejores herramientas para obtener los mejores resultados y sobre todo permite organizar los tiempos, las condiciones y las pautas para que, al final del proceso de venta, hayamos superados las expectativas de nuestros clientes.
Cuando hay confianza no existen los miedos.